AMLO, al borde de un ataque de nervios
Víctor Sánchez Baños jueves 11, Ene 2024Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
- Las obsesiones presidenciales
- Nueve meses para aniquilar el AICM
- No le alcanzó todo el sexenio
- Acabó con ahorros del Pueblo
- Ulises Lara es capaz, pero es psicólogo
- Sucio proceso para la FGJCMX
- ESG de Volkswagen México
Siempre el traidor es el vencido y el leal es el que vence
Pedro Calderón de la Barca (1600-1681) Dramaturgo y poeta español
Todo se le complica a Andrés Manuel López Obrador al final de su sexenio. La economía, las elecciones, sus promesas de campaña incumplidas, así como el desastre económico, social y de seguridad, son los pasivos que dejará en el camino.
Como a todos los presidentes mexicanos. El último año es el más difícil, ya que no tiene el apoyo ni de sus aliados, ni mucho menos de sus opositores.
En Palacio Nacional, día a día, él se convierte en el más solitario ser humano. Ya no le tiene confianza a su primer círculo de funcionarios, ni mucho menos aquellos que llegan de zalameros a tratar de buscar, aunque sea unos meses, acceso a la ubre presupuestal.
Es el momento en que se da cuenta, que sólo cuenta con sus hijos y esposa. Desconfiará de una amistad sincera y desinteresada.
Por ello, en ese escenario quiere, cuando menos, terminar con las obras icónicas de su gobierno. De ello depende su trascendencia en hierro y concreto. Lo que valoran es la placa inaugural, pero verlos activos es lo trascendental para los políticos de pensamiento sesentero.
En el caso de las obras del lopezobradorismo, como el Aeropuerto Felipe Ángeles es el que cobra mayor relevancia, ya que fue la primera que medianamente terminó. No que se convierta en una terminal como la de Toluca, Cuernavaca, Puebla o Querétaro, que tienen un tráfico miserable.
Para ello utiliza todas las herramientas, mañas y artimañas a su alcance, como determinaciones administrativas de la SICT, que encabeza Jorge Nuño, hasta decretos y acuerdos.
Por ello, a partir de este mes disminuye el número de operaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con el fin de desviar vuelos al AIFA, y activarlo más. Es un aeropuerto miserable, pero e esa manera cree AMLO que acaba con el pasado de los faraones anteriores.
No se ha dado cuenta el Presidente que sus funcionarios más cercanos que se niegan a cuestionar una orden presidencial porque creen que pueden desatar su ira. Además, no le dicen que los pasajeros no quieren ir al aeropuerto de Santa Lucía, ya que el trayecto a esa terminal, es inseguro y muy oneroso. Trasladarse de muchos puntos del centro de la ciudad hacia el sur hace mucho más caros y tardados los trayectos al destino.
Además, aumentó las tarifas de los servicios que ofrecen a las aerolíneas, en el AICM, en más de un 77%; ordenó que todos los vuelos de carga aterrizaran en el AIFA.
Parece obsesión presidencial, el cerrar el AICM. Para ello, lo convirtió en una pocilga y escatima dinero para su mantenimiento y convertirlo en una empresa en manos de la Secretaría de Marina, desordenado, sucio, apestoso, y con abusos de los concesionarios de la seguridad y de los alimentos.
Con todo ello, es mucho mejor que la terminal avionera de Santa Lucía.
Otro capricho es la refinería de Dos Bocas. En lugar de construir una petroquímica para plásticos, resinas y aditivos, prefirió hacer una refinería; una refinería que en lo que el resto del sexenio no producirá un sólo litro de gasolina; un barril sin fondo del presupuesto.
Otro elefante blanco es el Tren Maya que no está en el mapa de interés de los turistas, ni siquiera da servicio de carga. En cambio, provocó un desastre ecológico en la Península de Yucatán.
El tren transístmico, es otra obra faraónica que podrá dar resultados en unos 4 o 5 años. Sin embargo, no competirá al Canal de Panamá. Es oneroso todo tipo de maniobras para desembarco y reembarco de mercancías en Minatitlán y Salina Cruz. Lo más sencillo es mantenerlos en un barco hasta su lugar destino.
Como dice la canción “Triste Recuerdo”: “El tiempo pasa y no te puedo olvidar…”.
PODEROSOS CABALLEROS
ULISES LARA: Si pierden, arrebatan. Así es Morena. Ante la falta de ratificación de la ahora ex fiscal, Ernestina Godoy, dejan en su lugar a su incondicional: Ulises Lara. Con una carencia total de estilo, clase política y social, impusieron a Ulises como el encargado del despacho mientras el jefe de gobierno, Martí Batres, propone una terna para la designación del nuevo fiscal. No se trata de criticar, por criticar. Nombraron a un licenciado en Psicología, como fiscal bajo la premisa que es doctor en Derecho. Además, para poder tener la experiencia laboral que ordena la Constitución, se necesita el título de licenciado en Derecho para poder realizar litigios y, Ulises, no tiene tampoco la experiencia. Por ese motivo no puede ser fiscal. Desafortunadamente, todo indica que no tienen en Morena aspirantes clasificados para lograr ocupar esa posición.
RESPONSABILIDAD SOCIAL Y GOBERNANZA
Volkswagen de México, bajo el liderazgo de Carlos Henry, presentó la conferencia “Misión Ambiental de Volkswagen de México”, destacando su compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social empresarial a través de la Estrategia Ambiental de la Producción al Año 2030 “Go to Zero Impact Factory”, la cual se compone de cuatro áreas focales que comparten las plantas del Grupo Volkswagen a nivel global; Proteger el clima, conservar recursos, preservar ecosistemas y asegurar cumplimiento ambiental.